──────── Ω Ω Ω ──────
LA CIUDAD DE LEÓN VIEJO BAJO LA TIERRA, MAYO 1967 Fotografía del Dr. Eduardo Pérez-Valle |
───────Ω Ω Ω ───────
26 de Noviembre, 1966
Sr. Prof.,
Armando RIZO OYANGUREN
Departamento de
Historia,
Universidad
Nacional.-
Managua..
Impuesto de los conceptos vertidos en su atenta del x corriente, con sumo
agrado comunico a Ud. mi entusiasta conformidad para colaborar con el
Departamento de Humanidades de esa Escuela, a fin de ubicar definitivamente el
sitio de León Viejo.
Como primer paso de mi parte, comenzaré a
ordenar los datos que obran en mi poder, referentes a este problema, datos que
recogeré en una serie de artículos de próxima publicación.
Mucho agradecería a Ud. se sirviera informarse sobre la bibliografía
reunida en la primera etapa de su investigación. Quizás yo pueda suministrarle algunas
fichas importantes.
Soy de opinión que León Viejo debe localizarse previamente dentro de las
cuatro paredes del estudio. La excursión comprobatoria vendría después, como
lógica consecuencia de la investigación documental. No obstante esta opinión,
nunca estaría de más la visita a los lugares señalados como probables sedes del
Viejo León, y si las circunstancias lo permitieren y Ud. tuviere a bien
comunicarme sus planes oportunamente, con mucho agrado le acompañaría en las
excursiones que proyecta.
Sin más por hoy, y a la espera de sus gratas nuevas, le saludo atentamente.
Eduardo PÉREZ-VALLE
──────────Ω
Ω Ω Ω
Ω ──────────
SITIO ARQUEOLÓGICO "RUINAS DE LEÓN VIEJO" Inicio de las excavaciones. Febrero de 1967 Fotografía tomada por el Dr. Eduardo Pérez-Valle |
──────────Ω Ω Ω Ω Ω ──────────
(Anotaciones para reconstruir la primitiva capital de Nicaragua)
PRIMERA SERIE
Extraída de la Colección de Documentos para la Historia de Nicaragua,
por Andrés Vega Bolaños (Colección Somoza)
INTRODUCCIÓN
La
colección de Documentos para la
Historia de Nicaragua, del Dr. Andrés Vega Bolaños, es la
primera obra que se realiza con miras a proyectar una gran luz sobre la
historia colonial de nuestro país.
En
efecto, la “Colección de Documentos referentes a la Historia Colonial
de Nicaragua”, formada en el Archivo de Indias por el Padre Pastella, S. I.,
por instrucciones del Ministro de Instrucción Pública Ing. José Andrés Urtecho,
y publicada por el gobierno de don Diego Manuel Chamorro en 1921, sólo contiene
la exigua cantidad de 47 documentos, escogidos exprofesamente con miras a la
ventilación de las cuestiones limítrofes de Nicaragua con Honduras y Colombia.
Por otra
parte, de nuestros autores que han tratado en conjunto la historia patria, vale
decir, Ayón y Gámez, el primero realizó una labor apreciable como compilador en
un solo cuerpo de obra de multitud de datos hasta entonces dispersos en nuestro
perdido archivo nacional y otras escasas fuentes similares. La Historia de Gámez vale
como síntesis de Ayón y complemento de éste, en el período posterior a la Independencia.
En
cambio la obra de Vega Bolaños es de una magnitud monumental, cuyos alcances
pueden apreciarse al sólo notar que en los diecisiete tomos que llegaron a
publicarse comprende 838 documentos, algunos de ellos verdaderos legajos
resolubles en multitud de documentos primarios, todos los cuales abarcan un
período que va desde el descubrimiento de Nicaragua por Colón (narrado en su
famosa carta de 1503) hasta el año 1551.
Ciertamente,
no es bastante honrado establecer parangones entre una obra histórica de
conjunto y una colección de documentos. Pero aquí viene al caso, porque a
finales de la gestión diplomática del Dr. Vega Bolaños en España, se suspendió la publicación de la Colección de Documentos
para dar cabida en la “Colección Somoza” a las reediciones de Ayón, Gámez y
Arancibia, 5 tomos en total, que si bien son importantes para nuestra
bibliografía, están muy lejos de compensar lo que hubiera significado la
publicación de otros tantos tomos de la Colección de Documentos.
Es una
gran pérdida para nuestra cultura que esta obra no se haya terminado. Cualquier
gobierno de la República
se honraría grandemente ordenando su continuación, así como se honró
grandemente por ello el gobierno que la comenzó.
En el
proemio que encabeza el tomo primero de la Colección el Dr. Vega Bolaños estampa acertados
párrafos que quiero transcribir aquí:
“Casi
todo lo relativo a la formación y desarrollo de nuestra Nación ha sido
estudiado en diversas ocasiones aprovechando las colecciones de los
investigadores españoles e hispanoamericanos, las obras de los cronistas que
activamente participaron en la vida de América y algunos estudios parciales
relacionados con hechos o circunstancias especiales”.
“Pero
todo o casi todo ese abundante material necesita de la depuración que se
obtiene estudiando las fuentes puras que proporcionan la verdad o facilitan su
búsqueda y encuentro”.
“Es
copioso el número de documentos que he podido encontrar en los muy ricos
archivos de España; además de lo mucho que he copiado, he anotado la signación
y detalle de otros tantos, referentes a ese largo período en que España se
proyecta sobre la provincia que lleva el nombre de su cacique principal”.
“Omitimos
lo que cae en el campo de la interpretación o del juicio, afanados en disponer
de mayor espacio para los documentos, pues todo aquello queda reservado para
quienes hayan de utilizar esta materia prima”.
“Siguiendo
el orden cronológico, parecen aquí todos los documentos encontrados. De esta
manera, los futuros investigadores, que espero sean muchos, tendrán la máxima
facilidad para el estudio, y la satisfacción que proporciona la abundancia de
datos auténticos sobre los hechos de nuestra historia, compilados desde el
mismo momento en que nos descubrió Colón, por la índole de sus primitivos
habitantes, por su privilegiada posición y las características de quienes
aparecieron conquistando y colonizando el territorio”.
La Ciudad de León Viejo bajo la tierra / Volcán Momotombo Fotografía del Dr. Eduardo PÉREZ-VALLE, Febrero 1967 |
Pues
bien, de este importante acervo de documentos, que desgraciadamente sólo cubren
un corto período de nuestra vida colonial, entresaco los siguientes datos para
reconstruir la vida cotidiana de León Viejo, primitiva capital de Nicaragua.
Cada
anotación va precedida de un número, puesto por mí, para futuras referencias.
Al final tienen un número romano, que indica el tomo de la colección de donde
fueron sacadas; y un número en cifras arábigas, que indica la página de ese
tomo. Hubiera querido poner las notas en un estricto orden cronológico, pero
por falta de tiempo, y por considerar este un trabajo preliminar de algo más
acabado, las dejo como están.
Falta
aún una advertencia que me parece de justicia y elemental espíritu científico
poner aquí. La extraigo de la Nota
Preliminar que a la reedición del “Cedulario de Encinas” puso
el Dr. Alfonso García Gallo, Catedrático de Instituciones Políticas y Civiles
de América en la
Universidad de Madrid:
…“En la
mayor parte de los archivos y en especial en el de Indias, se guarda la
documentación oficial del Consejo de Indias o de otros organismos y en estos,
antes como ahora, sólo se formó expediente a los funcionarios cuya conducta era
mala o cuando menos dudosa. Mientras que, por el contrario, al oficial íntegro
y celoso de su deber nunca se le sometió a procedimiento. Y así resulta que los
expedientes conservados en los Archivo, por su propia naturaleza, sólo se
refieren a la parte peor de la
Administración. Es un error de método
utilizar estos expedientes como única fuente para conocer el estado social de
un país cualquiera teniendo en cuenta solamente los archivos de los tribunales
de justicia, donde aparece registrada toda la escoria de la sociedad, pero en
los que no se habla para nada de la mayor parte de la población”.
Dejo a
los lectores el cuidado de aplicar esta importante advertencia en los casos que
corresponda.
──────────Ω Ω Ω Ω Ω ──────────
Fotografía Panorámica del sitio "León Viejo", mayo de 1967 Fotografía del Dr. Eduardo Pérez-Valle |
──────────Ω Ω Ω Ω Ω ──────────
I
HASTA LA
MUERTE DE PEDRARIAS, 1531
1.- 1529, Enero. La iglesia está servida, aunque pobre
de ornamentos y campanas. Hay dos monasterios. El de Santo Domingo, hecho por
el vicario general Fray Diego de Loayza, con un capellán; y el de Nuestra
Señora de la Merced ,
hecho por el vicario provincial Fray Francisco de Bobadilla, con cuatro
religiosos (carta de Pedrarias). I. 455.
2.- Pedrarias en una posada, Diego de López en otra,
dice Cereceda. I. 462.
3.- Pedrarias dice que en los arrabales de León, en la
provincia de Imabite, existen alrededor de 15,000 indios. La iglesia construida
en León es la mejor iglesia “que en estas partes” se ha hecho. El Momotombo
presentaba cráteres activos. I. 129.
4.- Pedrarias manda hacer la
Casa Real de fundición provista de todo lo
necesario. I. 378.
5.- La Casa Real
queda en manos de Juan Meco, de 45 años, vecino de León, en 1528. Las
ordenanzas reales se fijan en una tabla a la entrada. I. 383.
6.- El primero que fundió en la
Casa Real fue el vecino Alonso Martín de
Don Benito. I. 392.
7.- Al ir a residenciarse a Panamá ya Pedrarias la
dejó hecha, de tapia, declara Rodrigo del Castillo, Tesorero de S. M. en tiempo
de Salcedo. Las ordenanzas quedaron en poder y casa de Isidro Robles, marcador
y fundidor. No las pidió Salcedo ni las expuso Pedrarias sino a su vuelta. I.
420.
8.- 1528. Cédula Real ordenando se haga Casa de
Fundición, pues no la hay. I. 439.
9.- Cereceda habla de la “fortaleza-castillo” de León.
La casa de Estete está cercada de tapias, junto a la fortaleza. I. 460, 462, 465.
10.- Fray Diego
de Loayza llega a León en Septiembre de 1528, sale en Enero de 29 hacia las
Islas, a enviar religiosos, y de ahí a España. 1470.
11.- En 1529 ya había en León varios sastres,
espaderos, cerrajeros, carpinteros, zapateros, silleros, curtidores,
zurradores. Los principales productos de la región eran tintas de teñir,
cáscaras para curtir, vino de maíz y frutas, aceite de semillas de mamey
(escaso), y ropa de algodón “que algunos (españoles) ya la usan”. I. 484.
12.- León y Granada están en muy buenos sitios, dice
Castañeda. Hay estero que entra a tres leguas de León y le sirve de puerto. I. 496.
13.- 1529. Juan Martín de Talavera es pregonero. I. 500.
14.- 1529. El Br. Pedro Bravo es cura de la Iglesia Mayor. I. 465.
15.- 1529. Nómina de escribanos: Juan de Ribera,
Bartolomé Pérez, Bernardino Valderrama, Juan de Simancas, Juan de Espinosa,
Benito de Prado (escribano mayor de minas y veedor). I.
500.
16.- La casa de fundición tenía el suelo de tierra,
pues había que regarla para barrerla. II. I I.
17.- Había una “casilla” (casita) junto a la
fundición, dicen testigos castañedistas. Castañeda edificó, dicen, su casa
cercada de tapias, dando buen ejemplo que siguen Hernando de Soto y Hernán
Ponce de León, compañeros y vecinos. II. I I, 122, 137.
18.- Iglesia de Santa María de la Merced.
II. 120, 151.
19.- El provisor de la Iglesia Mayor es el Br. Pedro
Bravo, quien vive frente a la plaza.
II. 157.
20.- Háblase de “carreras” y “traviesas”, términos que
parecen significar avenidas y calles.
II. 173.
21.- Al parecer el veedor Pérez de Valer también vivía
frente a la plaza.
II. 173.
22.- Se mencionan varias plazas. II. 173.
23.- Desde la casa de Pérez de Valer se veía la puerta
de Pedrarias. II. 181.
24.- Casa de Juan Téllez; posada de Isidro
Robles. II. 181.
25.- Para ir de donde Pedrarias adonde Juan Téllez, se
pasaba por donde el tesorero Diego de la Tobilla.
II. 181.
26.- 1529. Alcaldes
y regidores:
Peñalver,
alcalde;
Rodrigo
Lozano,
Francisco
Lozano,
Rogel
de Loría,
Francisco
Porras, regidores. II. 288.
27.- El
“palacio de Pedrarias” en 1530 era una casa con dos puertas a la calle y portal. II. 289, 290.
28.- Había un bohío construído junto al palacio para
la guardia, con corral delante, para los caballos. II. 289, 290.
29.- La guardia de Pedrarias: Diego de Mercado
(capitán), Pedro García Espadero, Alvar Núñez Portuguez, Hernando de Cosca,
Andrés de la Guarda ,
Alonso de Segovia, Luis Jiménez y Hernán Rodríguez. II. 281, 290.
30.- Más guardas de Pedrarias: Fernando de Caherá,
Francisco Villacastón. II. 290.
31.- Había una camarilla con armas junto al “aparador”
(oficina) de Pedrarias en su casa; y una puerta que daba de la sala al
corral. II. 290.
32.- Otro guarda (o pedrarista armado): Gonzalo
Barbero. 291.
33.- Pedraristas armados en las elecciones de alcaldes
y regidores el 1º. De Enero de 1530: Alonso Martín de Don Benito, Andrés de
Molina, Iñigo de Iberna (a) El Tuerto, Alcántara Botello. II. 295.
34.- Hernando de Soto y Hernán Ponce tenían su casa en
una esquina a un lado de la iglesia mayor.
II. 308.
35.- Casa de Pedrarias, en la plaza. Linderos: “a la
una parte, casas de Juan Giniles, e de la otra parte, casa de Antonio Picado, e
de la otra parte, casa del dicho heredero, y por delante la casa Real”. II. 308.
36.- Francisco Hurtado, regidor perpetuo, se sentaba a
veces a la puerta de la iglesia con el Br. Pedro Bravo, provisor; Rodrigo
Pérez, arcediano; y el cura Gonzalo
Hernández. II. 350.
37.- 1530, Marzo. La iglesia y los monasterios se
están construyendo de tapia, con ayuda de una tierra blanca, recia como
argamasa. Todos tapian sus casas por temor al fuego. II.
402.
38.- Pedrarias manteníase enfermo y en cama casi siempre. II.
213.
39.- Atuendo de la Tobilla el 1º de Enero, 1530: capa, espada y
caperuza negra; “en soletas de borceguíes, de manera que el dicho tesorero no
solía andar”. II. 343.
40.- I En. 1530. Atuendos: Diego de Mercado, en calzas
y en jubón; Alonso de Segovia, un casco en la cabeza y un broquel debajo de la
capa, con la espada en la mano; Luis Ximénez y Villacastón con espada y cota de
malla debajo de la capa. II. 290, 291.
41.- Diego de la Tobilla , libidinoso,
escogía lo más granado de la indiada femenina para su lecho. Cohabitó con la Villacreces , la de
Galeano, con Ana Jiménez, la
Morruga , la de Narváez, con María de Narváez (de Téllez
Girón), con la mujer de Padilla, etc.
II. 242, 244. (VI., VII.).
42.- Sobre Pedrarias: Su mujer, doña Isabel de
Bobadilla. Tres hijos varones, dos fallecidos (1530) y uno de 20 años. El hijo
segundo murió en Tierra Firme. II.
452.
43.- Se establecen 8 regidores en vez de 6, más 2
alcaldes. II. 495.
44.- 1526, 30 de Junio. Hay seis regidores nombrados.
Se necesitan dos regidores más, para poder formar regimiento cuando algunos
están ausentes. Pedrarias autoriza a regidores y alcaldes a nombrar otros
dos. II. 495.
45.- 1529. La elección de alcaldes y regidores se
hacía “la víspera de año nuevo”. Juntos el alcalde mayor, el consejo, justicia
y regidores de la ciudad elegían personas hábiles y suficientes, vecinos, para
que su señoría el Gobernador escogiese los alcaldes y regidores del nuevo
año. II. 496, 499.
46.- 1529. – El alcalde mayor Castañeda pretendía que
no hubiese más que los tres regidores nombrados por el rey y quería proponer
para alcaldes a parciales suyos, dice Pedrarias. De los regidores nombrados por
el rey, uno era “persona de poca mañana, criado del dicho alcalde mayor; y el
otro asimismo pobre y de poca experiencia, recién venido de España, que no sabe
las cosas de la tierra ni tiene qué comer en ella”. Y así los tendrá Castañeda,
“mayor prestos para lo que quiere hacer”… Para lograr sus propósitos Castañeda
se había contraído con dádivas a los alcaldes ordinarios del año anterior
Isidro de Robles y Álvaro de Peñalver, así como a los mencionados regidores por
el rey, afirma Pedrarias. II 497.
47.- Del partido de Castañeda: Isidro de Robles,
Álvaro Peñalver (acompañante de doña Ana), Francisco de Porras, Francisco
Hurtado, Rogel de Loria, Rodrigo Lozano. Algunos hasta han vendido su casa para
ir a vivir cerca de él en otra peor.
II. 533.
-----------------------------------
©, 2017
Se autoriza
la reproducción, por favor citar la fuente
No hay comentarios:
Publicar un comentario